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Dieta keto: ¿para quién sí y para quién no? Lo que la ciencia médica realmente dice
La dieta keto —o dieta cetogénica— ha ganado enorme popularidad como estrategia para perder peso y mejorar la salud metabólica. Pero, ¿qué hay detrás del fenómeno? ¿A quién se puede prescribir con seguridad y en quiénes está claramente contraindicada? Desde Esencial Grupo Médico, como médica nutrióloga (con formación en medicina y posgrado en alimentación y metabolismo), respondo estas preguntas con base en la mejor evidencia científica.

¿En qué consiste realmente la dieta keto?
La dieta cetogénica consiste en reducir los carbohidratos a un rango muy bajo (usualmente 10-50g/día) y aumentar de forma significativa la proporción de grasas saludables, generando un estado de cetosis nutricional. En este estado, el cuerpo utiliza cuerpos cetónicos como fuente principal de energía en lugar de glucosa. Existen variantes (clásica 4:1, Atkins modificada, dieta de triglicéridos de cadena media), pero todas comparten la restricción de carbohidratos y el aumento de grasas.
Este abordaje nació como tratamiento para epilepsia refractaria, pero se ha popularizado en los últimos años para el manejo de obesidad, síndrome metabólico, diabetes tipo 2 y, más recientemente, como dieta “de moda” para la pérdida rápida de peso.
¿Qué evidencia científica respalda la dieta keto?
- Pérdida de peso: Numerosos estudios y metaanálisis demuestran que la dieta keto puede generar una mayor pérdida de peso inicial (primeros 6 meses) en comparación con dietas bajas en grasa. Sin embargo, la diferencia tiende a disminuir después de 12 meses, lo que sugiere que parte del efecto inicial es por pérdida de agua y que la adherencia a largo plazo es baja.
- Mejora metabólica: En personas con obesidad y diabetes tipo 2, puede mejorar el control glucémico y reducir la necesidad de medicamentos, al menos en el corto plazo. No obstante, los beneficios tienden a atenuarse después de un año, en parte por la dificultad de mantener una dieta tan restrictiva.
- Perfil lipídico: El efecto sobre los lípidos es variable. Suele disminuir triglicéridos y aumentar HDL, pero PUEDE ELEVAR EL COLESTEROL LDL (colesterol “malo”), especialmente si la fuente principal de grasa es animal y rica en saturados.
- Epilepsia: Su efectividad en epilepsia refractaria está comprobada, pero siempre bajo control médico estricto.
¿Quiénes pueden beneficiarse realmente?
- Adultos con obesidad o sobrepeso y enfermedades metabólicas asociadas (diabetes tipo 2, hígado graso, síndrome metabólico) bajo seguimiento médico y con laboratorios de control.
- Pacientes con epilepsia refractaria (cuando otros tratamientos no funcionan), siguiendo protocolos médicos específicos.
- Personas con motivación alta y capacidad para sostener una dieta restrictiva, previo tamizaje clínico y metabólico.
Contraindicaciones y riesgos de la dieta keto: la importancia de la valoración médica
La evidencia es contundente: no todas las personas pueden iniciar una dieta keto sin riesgos. Según revisiones recientes y guías clínicas, está contraindicada en:
- Embarazo y lactancia: Se asocia a mayor riesgo de defectos del tubo neural y baja de folatos. Las mujeres en etapa fértil deben ser advertidas de este riesgo.
- Diabetes tipo 1: Aumenta el riesgo de hipoglucemias graves y cetoacidosis, potencialmente mortal.
- Enfermedad renal o hepática avanzada: La sobrecarga proteica y lipídica puede afectar la función renal/hepática.
- Trastornos del metabolismo lipídico y antecedentes de dislipidemia familiar: Puede disparar el LDL y riesgo cardiovascular.
- Antecedentes de trastornos de la conducta alimentaria: Restricciones severas pueden detonar recaídas.
- Niños, adolescentes y adultos mayores fuera de contextos específicos y controlados.
- Personas con historial de arritmias, enfermedad cardiovascular o uso de fármacos que alteran el metabolismo energético.
Además, los estudios muestran que la adherencia a largo plazo es baja, y pueden presentarse efectos adversos como estreñimiento, náuseas, deshidratación, deficiencias de vitaminas/minerales y, en casos graves, pancreatitis o alteraciones psiquiátricas.
Enfoque ético y diferencial: la función del nutriólogo médico
En Esencial Grupo Médico, destacamos que la dieta keto solo debe prescribirse tras una valoración clínica completa. Nuestro equipo integra un nutriólogo médico (con posgrado en alimentación y metabolismo), lo que permite:
- Diagnóstico diferencial de enfermedades que contraindican la dieta.
- Monitoreo de biomarcadores y ajuste de medicamentos.
- Personalización: elección adecuada de fuentes de grasas (preferencia por insaturadas de origen vegetal, como aguacate, nueces, aceite de oliva), evitando excesos de saturadas.
- Educación continua y acompañamiento para sostener los cambios y minimizar riesgos.
- Abordaje multidisciplinario en caso de enfermedades crónicas o condiciones complejas.
Conclusiones y recomendaciones
La dieta keto NO es universal, pero puede ser una herramienta terapéutica en el contexto adecuado y con supervisión profesional. La personalización, el seguimiento y la visión médica son fundamentales para obtener beneficios y evitar complicaciones. Si te interesa explorar esta opción, en Esencial Grupo Médico recibirás una evaluación integral, ética y basada en ciencia.
¿Te interesa la dieta keto? Agenda tu cita con nuestro nutriólogo médico y recibe una valoración científica, personalizada y segura. ¡Tu salud es esencial!